Terapia familiar

La terapia familiar consiste en identificar la actitud de la familia de manera integral y ayudar a saber cuales son las emociones que nos arrastran a la hora de tener pensamientos adecuados ante las diferentes situaciones estresantes del día a día, consiguiendo un equilibrio familiar.

 

Los conflictos entre padres e hijos, se tratan desde la psicología cognitivo conductual, es decir tengo un pensamiento y elaboro una conducta que me hace sentir bien, es psicología en positivo.

 

Utilizando la terapia familiar y de pareja, buscamos cambiar las relaciones familiares que no funcionan adecuadamente y crean sufrimiento y malestar.

 

Enseñamos estrategias para un desarrollo de la adolescencia sin conflictos, identificando las conductas no adecuadas y anticipándonos para prevenirlas.

 

Desarrollamos las herramientas necesarias para instaurar las mejores pautas de actuación y  promocionar así, un espacio de convivencia familiar normalizado y agradable. Consiguiendo así unas mejores funciones educativas, emocionales y sociales que permiten solucionar los problemas familiares.

 

Los objetivos de las intervenciones varían, en base a la problemática de cada familia como:

  • Conflictos en las relaciones entre padres e hijos.
  • Conflictos en las parejas.
  • Dificultades y conflictos en la convivencia familiar.
  • Problemas de autoridad parental.
  • Dificultades en la reconstrucción familiar.
  • Dificultades en familias monoparentales.
  • Agresiones (físicas y verbales) de los hijos hacia los padres u otros adultos que ocupan su lugar (abuelos, etc.)
  • Comportamientos de evitación, de aislamiento social y de rechazo a la propia familia.
  • Dificultades en las relaciones con los amigos.
  • Problemas derivados del acoso escolar.
  • Crisis de ansiedad, depresión, somatizaciones, etc.
  • Vivencias traumáticas no elaboradas.
  • Duelos complicados.
  • Sobrecarga y Estrés.
  • Problemas derivados del acoso laboral.