Taller de habilidades sociales
Taller de personalidad y comportamiento
Taller de educación emocional
Los talleres de Habilidades Sociales, Personalidad, Comportamiento y Educación Emocional están dirigidos a vuestros hijos, para que se conozcan y puedan resolver sus problemas mediante estrategias prácticas, por medio de un grupo de terapia.
Conseguirán:
- Conocerse.
- Aumentar su autoestima.
- Conocer la imagen que tiene de sí mismos.
- Saber cuales son sus puntos fuertes y sus debilidades.
Las relaciones sociales están dirigidas por nuestras emociones. El grado de cooperación que establecen nuestros hijos con sus compañeros o amigos, así forman la dimensión afectivo-emocional que se encarga de la confianza, la comunicación o la expresión de deseos o sentimientos, así como el placer de relacionarse con los compañeros o amigos, la ayuda, la expresión de sentimientos positivos, como son la alegría, el amor, el afecto o negativos como son el odio, la envidia o los celos.
Es decir, compartir el afecto, dar cariño y relacionarse con sus compañeros es lo más importante, porque les ayuda a reforzar la auto-confianza y a ser comunicativos.
Otra dimensión a mencionar, es la relacional-cooperativa, pues le ayuda a ver lo importante que es apreciar a la gente que tienen a su alrededor.
Contenidos como no empujar, esperar su turno, no gritar, son propios de la socialización y de la adquisición de las normas sociales. Son muy importantes para vivir en sociedad. Es vital aprender a ser tolerante.
En Adilex vuestros hijos consolidarán la aceptación de las normas de una manera divertida, convirtiéndose en un hábito y no en una “lata” que han de cumplir.
Trabajaremos en los talleres términos como, auto-concepto, auto-imagen, auto-competencia, todos estrechamente relacionados con las habilidades sociales.
Auto-concepto: concepto de sí mismo.
Auto-estima: valoración que el niño tiene de su auto-concepto, de aquello que conoce de sí mismo.
Auto-imagen: imagen que tiene de sí mismo, auto-afirmación frente a los demás.
Auto-competencia: grado de autonomía, competencia social.
Auto-aceptación: la aceptación de sí mismo tal y como son.
Cuando nuestros hijos tienen confianza y realizan eficazmente sus actividades diarias, aumentan la confianza en sí mismo y les sube la auto-estima.
Cito algunos de los ejemplos que nos podemos encontrar cuando vemos a nuestros hijos tristes:
- “Mi hija Montse está triste, sentada en un rincón del patio. Sus amigas no le han dejado jugar. ¿Qué puedo hacer?”.
- “Mi hija Ana siempre decide quién puede jugar y quién no, quién debe ser amigo y quién no”. Hay niñas y niños que no están de acuerdo, pero les da miedo decirle a mi hija Ana que lo que hace está muy mal. Pero un día Paula se enfrentó y le dijo a mi hija Ana que era una mala amiga porque no respetaba a los demás. A partir de este día todos le dieron la espalda a mi hija Ana y se ríen de ella. No se como ayudarla”.
- “Mi hijo Pedro siempre desobedece en el cole a los profesores, me han vuelto a llamar del cole para hablar de ello. ¿Cómo puedo ayudar a mi hijo si en casa a mi tampoco me obedece?.
- “Mi hijo Hugo grita, tira las cosas al suelo, golpea las puertas cuando le llevo la contraria, sólo porque le digo que se lave las manos o porque ha de hacer los ejercicios, no se que hacer”.
- “Mi hija Alicia, cuando dibuja o hace una manualidad siempre mira el dibujo de su compañera o su manualidad y dice que la de los demás es más bonita. ¿Cómo puedo hacerle comprender que la suya es muy bonita?”
Estos casos mencionados anteriormente son unos pocos de los muchos que suceden habitualmente con nuestros hijos. Por eso, es tan importante enseñarles quienes son, que se valoren y que no tengan miedo a cumplir las normas ni a sentirse avergonzado por no saber que hacer o decir en un momento determinado. Su personalidad se está formando y su futuro como persona dependerá de como haya interiorizado su infancia y su adolescencia.